El bequi llama a Teherán y el jefe enloquece

Comparto mis muchas horas laborales, principalmente, con un estresado que grita (el jefe), un hiperactivo con ticks (el bequi) y una psicóloga infiel (la secre).

Ayer vivimos otro de nuestros frecuentes episodios tragico-cómico-hilarantes. Nos han pedido un breve informe sobre las restricciones en las relaciones comerciales entre España e Irán. Se lo encargamos al bequi, quien, ni corto ni perezoso decidió ir directo y llamar, no al Ministerio de Asuntos Exteriores o a Aduanas, sino a la Embaja de España en Irán. Ante los gritos de mi jefe, pensando que se lamentaba por el gasto de tal conferencia, intenté calmarle explicándole que había sido una llamada corta, ante lo que su color rojo y sus decibelios se incrementaron: ¡¡¡ Y A TI LO UNICO QUE SE TE OCURRE ES EL DINERO. LOS ESPÍAS, LOS ESPÍAS. ESTADOS UNIDOS LOS TIENE EN EL PUNTO DE MIRA, SEGURO QUE LA CIA TIENE LOS TELÉFONOS INTERVENIDOS!!!!!!

Mientras, la secre segía messengereando a dos ventanas, con su novio y con su rollete.

Lo realmente sorprendente es que algo funcione en este mundo.