17 ene 2009

Reflexiones

En un momento vital complicado, en el que me estoy teniendo que plantear casi todo, me ha encantado esta viñeta de Ramón en El País de hoy:


7 ene 2009

Cuanto menos, menos ganas

La vuelta al “cole” tras las fiestas se me está haciendo muy dura. En realidad no tenía ni un día de vacaciones aparte de los festivos oficiales, pero Santa Claus me trajo un estupendo gripazo que me tuvo en casa del 29 al 2, con lo que para mi también ha habido parón navideño. No pude hacer nada espectacular, pero sí disfruté de la libertad que da no ir al despacho: levantarme a las 11, ver la tele, facebookear, jugar, ir todo el día en pijama y sobretodo no hacer nada.

Esto hoy me ha pasado factura. He descansado pero no he cogido fuerzas para afrontar este largo caminar por el desierto que será la ausencia total de festivos hasta abril, sino que mi cabeza se ha acostumbrado tan rápido ala buena vida, que hoy no hay quien la haga funcionar. Me he arrastrado hasta la oficina, pero no hago más que mirar por la ventana, mover papeles y mirar el reloj cada cinco minutos a ver si son ya las 19h.